Antonio: otro Guerra condenado por corrupción

Antonio Guerra de la Espriella. Foto: suministrada
Angeles

Antonio del Cristo Guerra de la Espriella, exsenador sucreño por Cambio Radical, se convirtió este miércoles, 15 de marzo, en el segundo miembro de su familia en ser condenado por corrupción.


La Corte Suprema de Justicia lo sentenció a 13 años, 8 meses y un día prisión por recibir un soborno de 200 millones de pesos a cambio de favorecer los intereses de la multinacional brasileña Odebrecht.

A Guerra, quien fue senador entre 1998 y 2018, lo hallaron culpable de los delitos de concierto para delinquir, tráfico influencias, y enriquecimiento ilícito. Y lo absolvieron de cohecho propio.

La Sala de Primera Instancia de la Corte también lo condenó a una multa de mil 175 millones 570 mil 739 pesos y a otra de 225 mil 687 salarios mínimos legales mensuales vigentes para la época de los hechos.

Y quedó inhabilitado para el ejercicio de derechos y funciones públicas por 13.5 años.

La Corte encontró que Guerra, quien formaba parte de la Comisión Tercera del Senado, «habría hecho parte de la empresa criminal liderada por los directivos de la empresa multinacional Constructoras Norberto Odebrecht S.A. y los lobistas Federico Gaviria Velásquez, Otto Nicolás Bula Bula y Bernardo Miguel Elías Vidal, entre otros, con el fin de cometer delitos indeterminados, con vocación de permanencia en el tiempo».

«[…] el exsenador ejerció indebidas influencias sobre el entonces ministro de Hacienda y Crédito Público y, por ende, miembro del Comité de Estabilidad Jurídica, Mauricio Cárdenas Santamaría, para asegurar la suscripción de un contrato de estabilidad jurídica que amparaba el de la concesión 001 de 2010, celebrado por el Instituto Nacional de Concesiones -INCO- con la sociedad Ruta del Sol S.A.S., subsidiaria de Odebrecht, lo cual debía materializarse a más tardar el 31 de diciembre de 2012», señaló la Corte en un comunicado.

Los lobistas, es decir, intermediarios de Odebrecht ante el Ministerio de Hacienda, recibieron por eso 4 mil millones de pesos, de los cuales 200 millones de pesos fueron para Guerra «por haber logrado para la organización delictiva el cometido propuesto».

«Guerra de la Espriella ejerció una influencia indebida sobre Clemente Luis del Valle Borráez, para que como presidente de la Financiera de Desarrollo Nacional accediera a otorgar el apalancamiento requerido por la sociedad portuguesa AFA VÍAS, interesada en adquirir una parte de la participación accionaria de la Constructoras Norberto Odebrecht S.A. en Navelena S.A.S., sociedad que el 13 de septiembre de 2014 había suscrito con Cormagdalena un contrato de concesión para la navegabilidad del río Magdalena, pero a marzo de 2016 no había logrado el cierre financiero debido a la captura en Brasil y posterior condena de Marcelo Odebrecht, cabeza el grupo empresarial que lleva su apellido», añadió la Corte.

Entre 2012 y 2017, según la Corte, la fortuna de «Toño» Guerra, como se le conoce en Sucre, se incrementó de manera injustificada en 587 millones 765 mil 369 pesos.

El alto tribunal negó la casa por cárcel para el excongresista, quien está en la cómoda Escuela de Caballería del Ejército, en Bogotá, y no en una cárcel ordinaria.

Al igual que su hermano

Guerra es hermano de Joselito, exsenador condenado en 1998 por el Proceso 8.000, escándalo por ingreso de dineros del narco en la campaña presidencial de Ernesto Samper Pizano tres años antes.

También es tío de María Angélica Guerra, hija de Joselito, y recientemente electa senadora por Centro Democrático.

Entre otros delitos, a Joselito lo sentenciaron a 6 años de cárcel por enriquecimiento ilícito, el mismo por el que hace un día condenaron a «Toño».

Ambos son hermanos de María del Rosario, exministra de Comunicación del Gobierno Uribe y senadora por Centro Democrático, quien esta vez desistió de la reelección.

De haberse materializado un proyecto de ley de esta última, sus hermanos condenados habrían hecho parte del denominado Muro de la Vergüenza, destinado a exponer públicamente en entidades oficiales a los corruptos.

Eso lo propuso públicamente el 21 de octubre de 2017 en un foro de Centro Democrático en Sincelejo. Hoy, esa exposición queda solamente en la memoria de la opinión pública y en la historia judicial del país.

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