En el mes de mayo por ley deben aprobarse los Planes de Desarrollo de los municipios y departamentos de Colombia. Sin embargo, ante la pandemia, se expidió un decreto legislativo, que permite a las entidades territoriales hacer cambios que pueden presentarse a las asambleas y concejos hasta el 15 de junio, y éstos darle trámite y aprobación a más tardar el 15 de julio.
En las capitales del Caribe, la gran mayoría de los planes de desarrollo ya fueron aprobados, y algunos consideraron los efectos de la COVID-19. Pero debemos partir de un principio: planear en medio de la pandemia es un asunto con altas complejidades.
Lo cierto es que la agenda de los programas de Gobierno, o incluso la concebida en enero de este año, no es la misma. De hecho, ahora más que nunca es más importante fortalecer la agenda 2030 en sus Objetivos de Desarrollo Sostenible-ODS.
Hay 10 puntos que cobran especial relevancia en los planes de desarrollo que cobijan a 4,3 millones de personas, que se destacan a continuación:
- Estrategia de mejoramiento de atención en salud pública, en especial fortalecer la red hospitalaria
- Fortalecimiento del sector agropecuario y plan de seguridad alimentaria
- Medidas para la recuperación económica
- Masificar las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones y/o reconversión tecnológica
- Una política de superación de la pobreza con criterios de focalización
- Acciones sociales para la población más vulnerable
- Innovar en el modelo de transporte público
- Fortalecimiento de la institucionalidad que impida la entrada de la corrupción
- Fortalecer la agenda ambiental
- Fortalecimiento de la convivencia y estrategia para la protección de las mujeres
Por otro lado, el presupuesto para el cuatrienio de las capitales del Caribe tampoco es el mismo. Hay un impacto en las finanzas públicas, y por ello, deben impulsarse estrategias financieras y/o de racionalización del gasto público para mantener los servicios públicos a la ciudadanía. A continuación podrán ver la inversión presupuestal del período 2020-2023 de cada capital del Caribe, y la población a la que está dirigida.
Tabla. Inversión de los planes de desarrollo de las Capitales del Caribe 2020-2023
| Ciudad | Presupuesto | Habitantes 2020 |
| Barranquilla | 13,6 billones | 1.274.250 |
| Cartagena | 6,02 billones | 1.028.736 |
| Santa Marta | 3,66 billones | 538.612 |
| Montería | 3,48 billones | 505.334 |
| Valledupar | 2,75 billones | 532.956 |
| Sincelejo | 2,32 billones | 293.951 |
| Riohacha | 1,54 billones | 201.839 |
Como lo indica el cuadro anterior, hay 3 categorías de ciudades. La primera comprende a Barranquilla y Cartagena con más de un millón de habitantes, y son aquellas con mayor inversión, aunque el presupuesto en Barranquilla sea el doble que el de Cartagena.
El segundo grupo son Santa Marta, Montería y Valledupar con más de medio millón de habitantes, donde esta última se distancia presupuestalmente de las dos primeras.
Por último, el grupo de Sincelejo y Riohacha con más de 200 mil habitantes, y con el menor nivel presupuestal. Para estas ciudades, se requiere una gran estrategia de fortalecer las instituciones, que garanticen mejorar la calidad de vida de sus habitantes.
El plan de desarrollo es la hoja de ruta para una ciudad, y por ello las administraciones públicas deben ejecutar lo que está escrito y la ciudadanía ser garante de su cumplimiento. La construcción colectiva ya dio paso, ahora viene la implementación colectiva. De esto depende que nuestras ciudades le apunten al desarrollo sostenible.
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