El asesinato de la comerciante Alina Taboada Olmos, perpetrado por presuntos asaltantes la madrugada de este 20 de febrero en una casa finca de Morroa, ha movilizado a autoridades tanto en Bogotá como en Sucre.
Este domingo estuvo en Sucre el general Fernando Murillo, comandante de la Dijin, quien delegó 20 unidades de esa división para apoyar las labores investigativas.
«Un equipo especial [del grupo] contra el patrimonio económico, especialmente expertos, desde Bogotá, y un equipo especial desde la ciudad de Bogotá de Dijin para esclarecer el homicidio de la mano de otro equipo especial que llega desde el CTI de la Fiscalía», precisó.
Murillo anunció una recompensa de hasta 90 millones de pesos para quien dé información que conduzca a los asesinos.
La recompensa fue aumentado de manera gradual. En la mañana, el coronel Carlos Correa Rodríguez, comandante de la Policía en Sucre, anunció 10 millones de pesos, al tiempo que el gobernador anunciaba 30 millones de pesos.
Luego, el Comando envió un mensaje donde la subía a 50 millones de pesos, y en la noche, después de un consejo extraordinario de seguridad, acordaron fijarla en 90 millones de pesos.
Las autoridades continúan la búsqueda de una camioneta Mazda CX5 de placas FIZ 204, de propiedad de la víctima y su familia, que fue robada por los asaltantes.
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