Ella nació y creció con la herencia musical de los Meza de Sincé, tiene padre, hermano y muchos tíos y primos reconocidos más allá de las fronteras de la Sabana sucreña por su profunda pasión por la música de vientos; es la voz de la Banda Escuela Adolfo Mejía, María Paula Mesa.
La única mujer músico de los catorce que representaron a San Luis de Sincé; no sólo toca el saxo sino que canta magistralmente desde los cuatro años de edad.
Durante el VIII Concurso Nacional Bandas Escuela del XXXV ENB de Sincelejo, interpretó Fiesta en corraleja, logrando encantar a los desprevenidos cibernautas que se conectaron por Facebook Live para disfrutar del certamen más reconocido de la música de vientos del Caribe colombiano.
María Paula se despidió de su paso por la Banda Escuela, pero con la semilla musical en la sangre de los Meza ya da los primeros pasos para profesionalizarse, así como muchos que han tenido la misma oportunidad en su natal Sincé, ya se cuentan por cientos los músicos que brotan espontáneamente de esta prodigiosa tierra.
Juan Pablo Mesa Ramón, Mesa con S por error de la Registraduría, el maestro a cargo de la Banda Escuela Adolfo Mejía de Sincé en la tradicional Casa de la Cultura del municipio y padre de María Paula, relata emocionado que ya no le alcanzan los dedos para señalar todos esos pequeños que pasaron por sus manos, como los trece jóvenes que todavía están bajo su tutela formativa y quieren seguir los pasos de los que ya migraron buscando otros rumbos y hoy son unos gigantes de la música tradicional de vientos.
«La música no sólo nos ayuda a relajarnos, los músicos pensamos diferentes y miramos la vida de otra manera», concluyó el maestro Juan Pablo Mesa Ramón, desde Sincé para el mundo artístico.
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