La interventora del Hospital Universitario es denunciada por un presunto contrato irregular

Inés Loaiza Guerra, de azul, cuando asumió como interventora y única vez que se ha dirigido en rueda de prensa. Foto: Gobernación de Sucre.
Angeles

Inés Bernarda Loaiza Guerra, agente interventora del Hospital Universitario de Sincelejo, nombrada por la Superintendencia de Salud, fue denunciada públicamente este miércoles 21 de octubre por contratar, presuntamente, con una persona inhabilitada.


El caso lo dio a conocer el diputado Luis Alfonso Álvarez, de partido Centro Democrático, poco antes de que terminara la sesión ordinaria de la Asamblea.

Álvarez aseguró que la agente había otorgado un contrato por $21.216.216 a la firma Grupo Cresort S.A.S., cuyo representante legal es Brainer Crespo Martínez.

Crespo aparece con antecedentes disciplinarios en la Procuraduría y por ende está inhabilitado para contratar. La inhabilidad se la impusieron el 19 de junio de 2015 y finaliza el 29 de octubre de 2020.

La inhabilidad que le aparece a Crespo Martínez, cuyo negocio está registrado en la Cámara de Comercio de Barranquilla, la profirió la Oficina de Control Disciplinario de la Policía Metropolitana de la capital del Atlántico y fue confirmada por la Inspección Delegada de la Regional 8 de la Policía.

El contrato con el Hospital Universitario, según el Secop –portal de contratación pública el Estado– fue suscrito el 28 de julio de 2020.

El objeto era adquirir equipos biomédicos para garantizar la operatividad de la atención del área Covid-19 del Hospital y el plazo, 5 días.

sucrenoticias.com dialogó vía telefónica con la interventora y ella nos pidió que le enviáramos los soportes de la denuncia porque no la conocía. Se los mandamos a su WhatsApp, pero caída la tarde no había respondido.

También te puede interesar: Prórroga cuestionada de la intervención al Hospital Universitario de Sincelejo

Cuestionamientos constantes

Los cuestionamientos en la Asamblea hacia la agente interventora Loaiza no son nuevos. Desde que inició su período hace más de un año, la corporación ha querido conocer el real estado del Hospital luego de ser intervenido –con prórroga de un año–, pero, según los diputados, la funcionaria no ha aceptado la invitación. Según estos, Loaiza, que gana más de $26 millones por mes, demuestra una actitud «indiferente».

Los coadministradores creen que, aunque Loaiza no es sujeto de control político, pues no es empleada del Departamento, sino de la Supersalud, aceptar la invitación es conveniente para que los sucreños conozcan cómo va la intervención.

De hecho, los diputados han reprochado que las inversiones en contratación no fortalezcan la economía sucreña porque, según afirmaron, los contratos del HUS son con empresas de otros departamentos.

Las informaciones que se conocen del HUS son por las periódicas notas que emite la Supersalud, entidad en la que algunos asesores de comunicación han prometido, en el caso de este medio, información que nunca envían.

Comentarios en Facebook

Deja una respuesta

Ingresa tu comentario
Por favor, ingrese su nombre aquí