Un ambiente de tensión se cierne sobre el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) en Sucre, donde luego de la captura de su director, la Contraloría ocupó este miércoles 4 de marzo la sede de esa entidad.
La diligencia corrió por cuenta de Luis Carlos Pineda, contralor delegado para la participación ciudadana, quien llegó temprano a la sede principal de la entidad en el barrio Boston, de Sincelejo.
«Estamos realizando una atención de denuncia, estamos recogiendo información que nos permita los elementos necesarios para atender una denuncia que se presentado por una red de veedurías de aquí, de la región, y sobre todo para conocer que ha pasado respecto de los temas de interés nacional sobre los programas de alimentación escolar, los programas de operación de los hogares infantiles y también con el tema asociado a la salida del director seccional del ICBF», sostuvo el funcionario.
Pineda explicó que la recopilación de información se dirige a las áreas administrativa y financiera, y que es una coincidencia que se dé poco después de la captura de Juan Ortega Hernández, quien luego fue dejado en libertad.
«Estamos también verificando qué ha pasado con la contratación que suscribió el director saliente, verificar la idoneidad de los contratistas y sobre todo verificar el estado de la ejecución contractual», añadió.
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