El asesinato de la fiscal Yolanda Paternina Negrete no prescribirá; la Fiscalía lo declaró este martes, 16 de abril, de lesa humanidad, lo que quiere decir que fue un crimen que ofendió a la sociedad en su conjunto y que debe ser investigado hasta sus últimas consecuencias.
La decisión se produjo solo dos días después de que la fiscal Mónica Gaitán, quien desde Bogotá trabajaba en el área de Derechos Humanos de la Fiscalía en este mismo caso, concediera una extensa entrevista a la revista Cambio denunciando que el entonces fiscal general, Luis Camilo Osorio, le prohibió investigar a los altos mandos militares implicados en el caso.
Gaitán, quien vivió en el exilio 12 años junto a su esposo, juez, contó cómo su colega Yolanda le narraba el miedo que sentía por estar investigando esa masacre.
Paternina fue acribillada el 29 de agosto de 2001 en el barrio La Ford de Sincelejo, riesgo que ella ya había denunciado. La funcionaria judicial investigaba quiénes estaban detrás de la masacre de 27 campesinos, ocurrida el 17 de enero de 2001. También fue una de las descubridoras de la parapolítica.
Esa matanza fue ejecutada por los paramilitares y hubo complicidad de militares, como ya lo ha comprobado la Justicia y lo han denunciado las víctimas.
«La Comisión Colombiana de Juristas explicó que, con esta decisión, la Fiscalía no podrá excusarse en el paso del tiempo para no adelantar las pesquisas para esclarecer el crimen», recogió Cambio en un informe publicado este martes.
La valiente funcionaria dejó dos hijos, era abogada de la Universidad de Cartagena. También trabajó en la Procuraduría y fue juez.
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