Las directivas del asilo El Socorro de Sincelejo han emprendido una campaña para que los 29 abuelitos que alberga reciban afecto y ayudas materiales.
La trabajadora social Luz Milena Santamaría, coordinadora de la Estación de Plenitud El Socorro, nombre legal del asilo, contó que la invitación a la comunidad es contribuir con sus donaciones al mejoramiento de la calidad de vida de los abuelos.
El asilo está necesitado de alimentos no perecederos, pañales para adultos, útiles de aseo personal y del hogar, así como sillas de ruedas, caminadores, muletas y bastones.
«Todo el que esté interesado puede llegar directamente a las instalaciones del asilo. Tenemos la página web www.estaciondeplenitudelsocorro.com y el teléfono 2765511″, detalló.
El amor, otra necesidad
Santamaría añadió que las necesidades no son solo materiales. Los adultos mayores, 18 hombres y 11 mujeres, también necesitan compañía, pues a la mayoría no les sobreviven familiares.
«El amor es fundamental para ellos, el aprecio, venir un rato, leerles un libro, acompañarlos 5 minutos; cualquier detalle afectivo para ellos es también importante para nosotros», indicó.
La mayoría de asilados están entre los 65 y 75 años y hay otros que ya pasan de los 90.
Aunque padecen achaques propios de la edad, todos reciben su control médico, por lo que gozan de buena salud.
La compañía de Emaús
Una de las compañías que han recibido los abuelitos son las de las servidoras de Emaús Mujeres, el retiro espiritual de la Iglesia Católica.
Las servidoras brindar acompañamiento espiritual, afecto, gestionan ayudas materiales y recreación.
Una labor de los abuelitos valoran y que se les nota en las sonrisas que ofrecen cada que las llamadas «mariposas», como se les conoce a las integrantes de Emaús Mujeres, aparecen desde la puerta que da al templo parroquial del Socorro.
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