La jueza tercera penal municipal de garantías de Sincelejo ordenó este martes que Manuel del Cristo Cadrazco Salcedo, exalcalde y candidato a la Alcaldía de San Benito Abad, sea encarcelado de manera preventiva por los delitos de lavado de activos y enriquecimiento ilícito.
La medida fue diferente para Milagro Piedad Martelo Imbett, esposa del exmandatario, a quien le concedieron la casa por cárcel por los mismos delitos.
Desde su captura, los esposos esperaron 12 días por la decisión del juzgado, sobre la cual la defensa de los esposos había pedido que fuera para ambos y en el caso más extremo, casa por cárcel con permiso de trabajo para Cadrazco.
Los esposos son investigados por la Fiscalía 30 Especializada de la Unidad contra el Lavado de Activos y el Enriquecimiento Ilícito que expuso interceptaciones telefónicas para señalar al exalcalde de utilizar su puesto en el período 2008-2011 para enriquecerse.
El proceso contra los esposos, que no aceptaron los cargos, inició de una denuncia de la Unidad de Información y Análisis Financiero, que lleva los movimientos económicos de los colombianos, en la que advertía de un patrimonio sin justificar.
La Fiscalía empezó a revisar documentación financiera de los cónyuges y encontró motivos para pedirle a un juez de garantías una orden de captura que fue efectuada el 12 de septiembre en Sincelejo por agentes de la Dijin.
Bienes ocupados
Mientras las audiencias preliminares transcurrían, la Fiscalía ocupó bienes de Cadrazco y su esposa valorados en $17 mil 580 millones.
Se trata de tres fincas y una retroexcavadora en San Benito Abad, y de una camioneta y dos apartamentos en el barrio La Toscana, de Sincelejo.
Estos bienes quedaron a disposición de la Sociedad de Activos Especiales (SAE) y están en proceso de extinción de dominio.
Entre aplausos y aclamaciones
Terminada la audiencia, los esposos fueron conducidos a la reseña carcelaria y a la salida de los juzgados los esperaban unos 60 de sus seguidores que los aplaudieron y aclamaron.
Algunos de ellos intimidaron a periodistas que cubrían la información, siendo este el segundo acto en contra de la prensa por parte de simpatizantes de los detenidos.
El primero ocurrió el 14 de septiembre en la mañana cuando dos periodistas fueron golpeados y amenazados en ejercicio de su profesión.
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