De las muchas visitas de altos funcionarios en los últimos años por la honda crisis financiera del Hospital Universitario de Sincelejo, la del procurador general de la Nación, este miércoles 5 de diciembre, parece ser la más esperanzadora.
Los empleados del ente asistencial, a los que les deben más de dos años de salarios, esperaron a Fernando Carrillo Flórez en la entrada de ese centro de salud y aunque querían hablar con él, este se reunió primero con el gerente Jorge Ducuara y representantes de los sindicatos.
Después de más de 40 minutos de reunión y arengas del grueso de los trabajadores que le exigían que saliera y se reuniera con los directamente afectados, Carrillo pidió silencio, y ante un ejército de uniformes blancos anunció una mesa de trabajo para la semana entrante.
Esta pudiera ser una más, de no ser porque, en palabras del procurador, terminará cuando el problema tenga lo que todos esperan: una solución.
«Cuál es la exigencia, que no se levante esa mesa de trabajo hasta que haya una solución a este problema. Ustedes van a ser veedores de lo que va a pasar lunes, martes y miércoles. ¿Qué les pido? Trabajen en una mesa conjuntamente, pónganse de acuerdo. Sé que muchos tienen pretensiones diferentes, pero si ustedes llegan con una posición unificada, con un catálogo de soluciones», explicó.
Las propuestas que salgan de la mesa de trabajo serán presentadas a altos funcionarios del Gobierno, empezando por los ministros, para que haya decisiones de fondo respecto del ente asistencial.
El jefe del Ministerio Público les comunicó a los trabajadores que denunciará a los jueces y abogados que promueven embargos contra los recursos públicos de la salud, que es la causa de la crisis financiera del ente.
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