El municipio de Los Palmitos, y en especial su población joven representada en estudiantes, fue testigo este miércoles de la certificación como territorio libre de sospecha de minas antipersonal.
Esa misma tranquilidad la comparten oficialmente Sincelejo y Corozal, a los que la Armada inspeccionó para liberar de los mortales artefactos.
La declaratoria se dio en un acto público en la plaza principal, donde el general Ricardo Perico Pinto, comandante de la I Brigada de Infantería de Marina, resumió este logro con una frase: «Podemos caminar tranquilos.»
El oficial añadió que esta buena noticia para la población civil se extiende a dos veredas de San Jacinto (Bolívar), donde la Agrupación de Explosivos de Desminado Humanitario de la Armada trabajó para limpiar la tierra de ese peligro.
El acto tuvo un momento conmovedor: la presencia frente a la mesa principal de la familia de Juan David Pérez Novoa, el niño de 13 años que murió por uno de estos artefactos en el corregimiento Las Tinas.
Sus parientes soltaron globos blancos sobre el cielo palmitero luego de hacer un minuto de silencio en su memoria.
Andrés Vivero León, alcalde del municipio de Corozal, aprovechó el momento para pedir a la Unidad para las Víctimas que repare a la familia de Juan David.
Lo mismo hizo el alcalde Freddy Rivera, de Los Palmitos, quien recordó a la Unidad la deuda del Estado con la reparación de viudas y huérfanos a causa del conflicto armado en los corregimientos de Naranjas y El Piñal.
Tristes cifras
Martha Isabel Hurtado, delegada del alto comisionado para la paz, informó que en Sucre hay un histórico de 75 víctimas de minas, entre civiles y fuerza pública, siendo estos últimos los más afectados.
Esos casos han ocurrido entre 1990 y 2019, en los municipios de Ovejas, Colosó, San Onofre, Sucre, Los Palmitos, Chalán, Majagual, Corozal, Guaranda, Galeras, Morroa y La Unión.
De Colosó es de triste recordación el caso de una familia en la que la el padre halló un artefacto abandonado y lo llevó a su casa para ajustar el fogón donde su esposa cocinaba. Esta le prendió fuego y el artefacto explotó y la mató. Otros dos miembros de esa familia resultaron heridos.
La delegada Hurtado sostuvo que hasta el 30 de junio de este año, ha habido en el país 11.765 víctimas de minas antipersonal.
Héroe y ejemplo
Una de ellas es Leonardi Barrios Lora, soldado profesional del Ejército, con 37 años y visiblemente recuperado física y emocionalmente, quien contó cómo una mina le cercenó una pierna en mayo de 2009 cuando patrullaba en San Vicente del Caguán.
Dedicado a su familia y luego de siete años de servicio, reside en Corozal, su tierra natal. Este miércoles vistió el uniforme caqui de la Agrupación de Explosivos de Desminado Humanitario, en reconocimiento a lo que vivió y a la esperanza de vida que representa.
Comentarios en Facebook