Sin resultados terminó la búsqueda de víctimas de la violencia de las Auc en Sucre; la Fiscalía inició las diligencias el martes en límites de Sincelejo con Sampués.
En esa propiedad no hubo ningún hallazgo. Esperaban encontrar el cuerpo de un menor de edad que residía en la zona sur de Sincelejo.
Ese crimen ocurrió en 2003 y, según información de exintegrantes de las Auc que están colaborando con la Fiscalía, la víctima fue sepultada en una fosa.
El miércoles, el ente investigador se trasladó hasta Betulia, donde esperaban encontrar los restos de dos personas en una finca.
El jueves, la Fiscalía inspeccionó un sitio en Corozal donde esperaba encontrar otro cadáver, pero, nuevamente, la búsqueda fue infructuosa.
Algunos de los motivos de la ausencia de resultados se deben a la humedad, los cambios de la geografía, entre otros, contó un exparamilitar al periódico El Heraldo.
En el caso del menor de edad, han pasado 18 años y sus familiares aún esperan un trabajo efectivo por parte de las autoridades competentes, puntualmente de la Fiscalía.
Solo hasta ahora, cuando la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) ordenó agilizar esta búsqueda, ha habido diligencias más notorias.
En el caso de los desmovilizados de las Auc que están acompañando el proceso, ya saldaron sus deudas jurídicas. Su vinculación a estas búsquedas la hacen sin obligación legal, aunque reconocen su deber moral en ello.
Pero la Fiscalía pudo haberles recordado eso mucho antes y convocarlos a emprender estas actividades para aliviar el dolor de los parientes de las víctimas.
Los datos que han trascendido de estas diligencias se han conocido a través de fuentes cercanas al caso y de manera extraoficial, pues la Fiscalía aún no comparte información de manera pública.
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