Aerolíneas de Antioquia (ADA) anunció hace unos días el fin de sus operaciones porque quebró. La noticia afecta directamente al departamento de Sucre, donde ADA estuvo por muchos años conectando a los sucreños con el interior del país.
Lo hacía desde los aeropuertos Las Brujas, de Corozal, y Golfo de Morrosquillo, de Tolú.
Precisamente este último tenía vida, más que todo, por la presencia de ADA, que era una aerolínea de bajo costo y que llevaba a destinos a los que otras empresas no.
Héctor Conde Rangel, director ejecutivo de la Asociación de Empresarios Turísticos del Golfo de Morrosquillo (Asetur-GM), consideró que la salida de ADA es «demasiado negativa».
«Para ADA, por ser de vuelos y aviones tan pequeños, el costo operativo era muy alto. Y si no había políticas comerciales, de llegar al tipo de turista que llega a la región, de cumplir con los vuelos, de diseñar estrategias de mercado con el apoyo del Estado… El Gobierno ha olvidado a las regiones y ahora más. Y siguen diciendo que el turismo es el nuevo petróleo de Colombia», consideró.
El líder gremial añadió que lo ocurrido desmejora la conectividad en Sucre y que esta es la segunda aerolínea que ya no estará en el departamento.
«Los grandes destinos como Cartagena, Barranquilla y Medellín siguen creciendo, y las regiones, olvidadas por el Estado. Dicen que Colombia es un país de regiones, pero lo es en el mapa», indicó.
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