Editorial-7 de septiembre de 2018: Dos horas a pie para llegar al colegio

Angeles

Los estudiantes del sector público en el municipio de Chalán protagonizan por estos días una justa protesta que debe tener eco en todos los que nos decimos sucreños.

Desde más de dos meses caminan más de dos horas diarias para llegar hasta sus escuelas en las veredas Honey, Alemania, El Cielo, Manzanares, La Ceiba y Los Comuneros.

Este acontecimiento denota una falta de gobierno inadmisible, pues se trata de niños y jóvenes que gastan desde las 5 de la mañana sus energías para superarse, muchos sin un plato de comida por ser pobres.

La solución urge y no amerita excusas como las que les ha dado la Alcaldía: que deben esperar a que arreglen las dos busetas que los transportaban.

Ni más faltaba que la burocracia y la tramitología colombiana hagan de las suyas con estos alumnos que son superiores a sus dificultades.

La Secretaría de Educación de Sucre debe intervenir cuanto antes para dignificar, como es debido, las condiciones de estos niños y jóvenes.

Se merecen nuestra admiración y respeto porque mientras muchos desertan por motivos inferiores, ellos se mantienen perseverantes.

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