Hace casi tres décadas que Antonio Navarro Wolf firmó el primer acuerdo de paz contemporáneo de América Latina.
Y después de ello nunca más se decidió por la insurgencia, por lo que este fin de semana, en una visita a Sincelejo y en pleno revuelo en el país por el anunciado regreso al alzamiento armado por parte de ‘Iván Márquez’ y ‘Jesús Santrich’, envió tres mensajes al respecto.
El primero fue para el presidente Duque, quien estaba en la capital sucreña a la misma hora que Navarro, reinaugurando el Sena Boston.
«¡Deje de ponerse a pensar en hacerle cambios unilaterales al Acuerdo de Paz!».
El segundo fue para los excombatientes que se han mantenido firmes en el proceso de reinserción a la vida civil.
«A los señores de las Farc que están cumpliendo, nuestro respeto, a Timochenko y todos sus compañeros, eso es lo que hay que hacer: cumplir la palabra».
El tercero fue para la sociedad colombiana y de todos, el más enfático: «Es hora de cerrar filas en defensa de la paz y decirle ‘no’ al alzamiento armado».
En política, pese a la violencia
Navarro, quien luego de su desmovilización del M-19 estuvo en riesgo por el exterminio de líderes del movimiento político surgido de ese proceso, aseguró que a ellos también les han incumplido, pero que la palabra hay que cumplirla.
«Y más aún, a Carlos Pizarro, líder del M-19 en ese momento y candidato presidencial en 1990, lo mataron 46 días de haber firmado el acuerdo de paz y pese a semejante gravedad y a la violación contra nuestra organización, en nuestra decisión de paz seguimos cumpliendo la palabra empeñada».
Navarro estuvo en la capital sucreña en la presentación de los candidatos a la Alcaldía de Sincelejo y a la Gobernación de Sucre por la Alianza Verde.
Se trata de Mario Ruiz Soto, profesional en gobierno y relaciones internacionales, y de Juan David Díaz Chamorro, médico, defensor de derechos humanos y exasesor de paz de Édgar Martínez Romero.
Ambos recibieron de manera simbólica las llaves del Partido Verde en un acto en el que también estuvo el senador Antonio Sanguino.
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