La Mesa Sucreña por la Paz reaccionó al asesinato, a manos del ELN, de 10 militares durante un ataque en el Catatumbo la semana pasada.
La organización, que integra a diferentes organizaciones de la sociedad civil, deploró el hecho y llamó a la guerrilla a abstenerse de «este tipo de acciones criminales que despiertan el repudio y la condena de toda la sociedad».
«Los militares, miembros de nuestra fuerza pública, son hijos de campesinos, trabajadores, habitantes de barrios pobres, a quienes la violencia y la guerra les arrebataron tempranamente la vida», resalta un comunicado de la Mesa.
El escrito señala que «la paz no puede ser instrumento para negar la vida y generar terror». «Este tipo de actos no le aportan nada al proceso de paz, como tampoco genera confianza para el avance de la solución negociada al conflicto armado».
Piden una revisión
La Mesa, que apoya la política de paz total del Gobierno, manifestó que cree en ese propósito, pero le pidió al presidente Gustavo Petro Urrego que revise la hoja de ruta del mismo.
«Sabemos de lo complejo y difícil que es el propósito de la paz total, pero deben hacerse los ajustes pertinentes para que la política pueda llegar a buen puerto, para bien de los colombianos y colombianas. Paz es vida, alegría, convivencia pacífica, en ningún momento, muerte», concluyen.
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