A las 10:30 de la mañana de este domingo 1º de julio, tras la celebración de la eucaristía en la catedral San Francisco de Asís, fue sepultada en el Cementerio Central de Sincelejo Zaida Martínez de Cárdenas, custodia de la imagen del Dulce Nombre de Jesús.
La misa fue presidida por el padre Adalberto Sierra Severiche, vicario general de la Diócesis de Sincelejo y párroco en Nuestra Señora del Perpetuo Socorro.
El presbítero indicó que para Martínez no era extraño estar en la presencia de Dios, pues participaba diariamente en la eucaristía.
«Mientras nosotros estamos ante su cadáver, ella está ante su Dios», sostuvo el sacerdote ordenado.
Reconocimientos
La Alcaldía exaltó la vida y la memoria de Martínez con la entrega en nota de estilo a sus familiares de tres reconocimientos.
«Reconózcase y exáltese póstumamente la vida y obra de la señora Zaida Martínez de Cárdenas, y que su nombre se mencione como referencia de la identidad sincelejana», dice el reconocimiento que le entregó la Fototeca Municipal.
Los documentos resaltan que durante seis décadas, la mujer protegió la venerada imagen del Dulce Nombre de Jesús y promovió el espíritu cristiano en la capital.
La efigie reposa en su casa de la Calle El Comercio de Sincelejo, es de origen español y tiene más de 300 años de antigüedad.
Cada año, en enero, parte la casa de la fallecida la procesión con la imagen del que también es conocido como ‘Cabecita de Oro’.
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