Horas de incertidumbre que agravaron su dolor vivió este martes 7 de julio una familia en Sincelejo porque en el sepelio de la señora Georgina Álvarez Chávez descubrieron que el cadáver puesto en el féretro no era el de la mujer, de 81 años.
El insólito hallazgo se dio cuando Dora, una hija de difunta, quien murió en la clínica La Concepción, insistió en que antes del entierro quería ver por última vez a su mamá.
Primero partió una parte de la bolsa blanca en las que envuelven ahora los cuerpos, pero solo se veían los pies, y luego, al abrir la parte por donde verían el rostro de la mujer, se vio el cuerpo bocabajo. El desconcierto fue mayor cuando voltearon el cuerpo y el cuerpo era el de otra persona que aún tenía restos de aparatos para la respiración.
A los pocos minutos del insólito hallazgo, Angie Sarria, hija de la fallecida, dialogó vía telefónica con sucrenoticias.com. Empezó una angustiosa búsqueda, ella desde Medellín, donde la tomó la calamidad, y sus hermanos en Sincelejo.
«Han llevado dos cuerpos y ninguno de los dos es de mi mamá», narraba la hija de Georgina mientras se movilizaban tanto la familia como funcionarios de la Secretaría de Salud de Sincelejo para la búsqueda del cuerpo.
«Mi hermano está como loco allá metido buscando contaminarse, buscando a mi mamá entre todo ese poco de personas contaminadas y mi mamá no murió de COVID. Les pido el favor que nos ayuden con eso», era el llamado de la mujer vía WhatsApp con este medio, que al conocer del caso se comunicó con la Secretaría de Salud de Sincelejo.
A las 7:56 de la noche, casi cuatro horas después del amargo momento en el cementerio, Angie comunicó a sucrenoticias.com que el cuerpo de su mamá ya había sido localizado.
¿Qué responden?
La clínica respondió en un comunicado en video que no ha existido error de su parte en el embalaje del cadáver y responsabilizó a un tercero del que no especificó nombre en esa grabación.
En un comunicado escrito sí se refiere a ese tercero como «funeraria» y luego lamenta el episodio ocurrido.
«(…) el manejo y disposición final de dichos (cadáveres), es competencia de la funeraria, entidad que se encarga del proceso de inhumación (entierro) o cremación del cadáver, no siendo posible que nos pronunciemos frente al error en la entrega de los restos mortales», señala el escrito.
Este es el video:
La funeraria La Esperanza, encargada del servicio de sepultura del cuerpo, rechazó en un comunicado que la clínica la responsabilizara del error y le recordó que la entrega del cuerpo a ellos es responsabilidad de la institución médica.
«No es responsabilidad de funeraria La Esperanza S.A.S. la identificación y embalaje del fallecido, clasificado como presunto COVID-19», precisó.
Este es el comunicado completo de la funeraria:
Comunicado de la Funeraria-08/07/2020 by Sucre Noticias on Scribd
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